Reflexión del Evangelio de San Juan 15, 9-17

SÁBADO DE 14 DE MAYO DE 2022

IV SEMANA DEL TIEMPO PASCUAL. CICLO C

Reflexión del Evangelio de San Juan 15, 9-17

Pbro. Asdrubal de Jesús Zeledón Ruiz.

Queridos hermanos, el Evangelio de esta día nos expresa la vida y el actuar de los apóstoles en la Iglesia, para poder entender el mensaje del Señor, quisiera reflexionar con ustedes dos puntos fundamentales del Evangelio de este día. En primer lugar, «el apóstol comparte la misma misión con Jesús», que es elegido y es enviado. Jesús y sus discípulos comparten el mismo amor que Dios Padre les ha entregado.

Este amor, ha sido compartido para todos nosotros, y estamos invitados a llevarlo a la práctica en nuestro día a día. Muchas veces cuesta amar a nuestro prójimo. Hoy, Jesús nos invita a permanecer en el amor,  el amor de Jesús a ellos y el amor del Padre a Jesús.

En segundo lugar, permanecer en el amor, significa vivir en la comunión perfecta con los hermanos en la fe y con Dios, término último de nuestro amor. El mensaje es claro: «ama a los hermanos como Dios nos ha amado» El mandamiento de Jesús es claro, ¿lo llevamos a práctica en nuestra vida cotidiana? Somos conscientes que vivimos en una sociedad donde la expresión del amor se ha ido quitando, es tarea nuestra, hacer vida este mandamiento en nuestra familia, en la Iglesia y la sociedad. ¿Te animas a esta tarea?

El verdadero discípulo de Jesús, precisamente porque se siente amado y comparte con Jesús el amor de Dios Padre, sabe que tiene que observar el mandamiento del amor. También nosotros, como discípulos nos sentimos llamados a amar: «Ámense los unos a los otros como yo les he amado» (Jn 15, 12). Por último, el verdadero discípulo de Jesús, que ha adquirido ahora la plena conciencia de ser su amigo, se siente llamado a vivir este amor hasta el final, hasta la entrega de sí mismo.

Entonces podremos alcanzar el ideal propuesto por Jesús: «Ya no los llamo siervos… a ustedes los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que he oído de mi Padre» (Jn 15, 15). Señor Jesús, quiero ser tu amigo. Sé que necesitas colaboradores libres y alegres, y yo quiero ser uno de ellos.

¡Para bien de nuestros hermanos, y nuestra propia salvación! Que así sea.

Publicado en Evangelio del Dia y etiquetado .

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *