Santos Cosme y Damián

La Iglesia recuerda a los Santos Cosme y Damián el 26 de septiembre. Conmemorando desde Italia hasta Oriente, sobre todo en Roma y en la Región de Apulia.

Eran hermanos gemelos y nacieron en Arabia, en el siglo tercero. Se dedicaron a la medicina y llegaron a ser muy afamados médicos. Pero tenían la especialidad de que a los pobres no les cobraban la consulta ni los remedios. Lo único que les pedía era que les permitieran hablarles por unos minutos acerca de Jesucristo y de su evangelio.

Nos cuenta la tradición que ambos aprendieron medicina en Siria, y que ejercieron esta noble profesión en Egea (hoy Ayás), Cilicia. Allí aplicaron sus conocimientos médicos tanto a personas como a animales y con gran pericia curaban las enfermedades. Muchas veces cuando todo les fallaba, su fe en Dios y sus virtudes cristianas demostradas en su actuar médico, les ayudaba a continuar con su deber médico. Esta forma de actuar atrajo a muchas personas deseosas de curarse, fuesen estas cristianas o no. Muchos de sus pacientes no creyentes se convirtieron a la fe cristiana después de su curación.

Los hermanos vivieron en tiempos del emperador Diocleciano (284-305), uno de los mayores perseguidores en la historia del cristianismo. En esta época, Lisias, el gobernador de Egea, estaba bajo órdenes estrictas de Diocleciano de neutralizar a los cristianos. Lisias les dio la opción a San Cosme y Damian de negar su fe o morir. Los hermanos fueron puestos a toda clase de torturas wy fallecieron por decapitación.

A ciencia cierta no se conoce el lugar exacto de los cuerpos pero en Italia existe una basílica dedicada en su nombre

Los santos Cosme y Damián son junto con San Lucas, los patronos de médicos y cirujanos.

Sacramento de Confirmación Parroquia Santa Gema

S.E.R Mons. Carlos Enrique Herrera visita la parroquia Santa Gema, celebrando Santa Eucaristía y realizando el sacramento de la confirma.

Nuestras oraciones por cada uno de los confirmados, que el Señor les guíe siempre y la Santísima Virgen María les acompañe

Celebración de Sacramento de Confirmación en Capilla San Isidro

S.E.R Mons. Carlos Enrique Herrera visita la Capilla San Isidro perteneciente a la parroquia Santa Gema, celebrando Santa Eucaristía y realizando el sacramento de la confirma.

Nuestras oraciones por cada uno de los confirmados, que el Señor les guíe siempre al camino del bien y la Santísima Virgen María les acompañe siempre y sigan el ejemplo de nuestra amada madre Santa.

Nuestra Señora de la Merced

La Santísima Virgen se le apareció a San Pedro Nolasco, en 1218, recomendándole que fundara una comunidad religiosa que se dedicara a auxiliar a los cautivos que eran llevados a sitios lejanos. Esta advocación mariana nace en España y se difunde por el resto del mundo.

San Pedro Nolasco, inspirado por la Santísima Virgen, funda una orden dedicada a la merced (que significa obras de misericordia). Su misión era la misericordia para con los cristianos cautivos en manos de los musulmanes. Muchos de los miembros de la orden canjeaban sus vidas por la de presos y esclavos. Fue apoyado por el rey Jaime el Conquistador y aconsejado por San Raimundo de Peñafort.

San Pedro Nolasco y sus frailes muy devotos de la Virgen María, la tomaron como patrona y guía. Su espiritualidad es fundamentada en Jesús el liberador de la humanidad y en la Santísima Virgen, la Madre liberadora e ideal de la persona libre. Los mercedarios querían ser caballeros de la Virgen María al servicio de su obra redentora. Por eso la honran como Madre de la Merced o Virgen Redentora.

En 1272, tras la muerte del fundador, los frailes toman oficialmente el nombre de La Orden de Santa María de la Merced, de la redención de los cautivos, pero son más conocidos como mercedarios. El Padre Antonio Quexal en 1406, siendo general de la Merced, dice: “María es fundamento y cabeza de nuestra orden”.

Esta comunidad religiosa se ha dedicado por siglos a ayudar a los prisioneros y ha tenido mártires y santos. Sus religiosos rescataron muchísimos cautivos que estaban presos en manos de los feroces sarracenos.

El Padre Gaver, en 1400, relata como La Virgen llama a San Pedro Nolasco y le revela su deseo de ser liberadora a través de una orden dedicada a la liberación.

Nolasco la pide ayuda a Dios y, en signo de la misericordia divina, le responde La Virgen María diciéndole que funde una orden liberadora.

Desde el año 1259 los padres Mercedarios empiezan a difundir la devoción a Nuestra Señora de la Merced (o de las Mercedes) la cual se extiende por el mundo.

San Lino Papa

Toscano de origen e hijo de Ercolano, Lino habría estudiado en Volterra y después se habría trasladado a Roma, donde encontró a San Pedro y se convirtió al cristianismo. No hay muchas informaciones sobre su vida, pero San Ireneo de Lyon dice que San Pablo y San Pedro encomendaron a Lino la función de Obispo y lo identifica con el personaje mencionado en la Segunda Carta a Timoteo. Eusebio de Cesarea reafirma esta identificación. Lo que es cierto es que fue Obispo de Roma después del martirio de los dos Apóstoles. Todos los elencos de los Obispos de Roma conservados también gracias a Ireneo de Lyon y Eusebio de Cesarea indican su nombre después del de Pedro.

Antes de llegar a ser Obispo de Roma, Lino vivió bajo la persecución desencadenada por el emperador Nerón contra los cristianos. Al inicio de su Pontificado, el Imperio romano vivió una fase turbulenta, con la muerte de los tres inmediatos sucesores de Nerón: dos fueron asesinados, mientras uno se suicidó. En el año 69 D.C. llega Vespasiano que pone orden. Su hijo Tito acaba después con la revuelta judaica y destruye el Templo en Jerusalén en el 70 D.C. Son los años en que Lino comienza a dar una organización a la Iglesia, ordena obispos y sacerdotes y da algunas reglas, por ejemplo – según el Liber Pontificalis – a él se le atribuye la obligación para las mujeres de participar en la Eucaristía con la cabeza cubierta.

También son los años de las disputas con la escuela de Simón Magno y con los Ebionitas, judeo-cristianos que practicaban la observancia de la ley mosaica. Es venerado come mártir, si bien no se ha comprobado que lo haya sido puesto que en aquel tiempo la Iglesia conoció un período de paz. Además, también según el Liber Pontificalis fue sepultado en la colina del Vaticano junto al Apóstol Pedro